Cada vez más las personas se dan cuenta de la relevancia que tiene mantener un adecuado nivel de comunicación en los ámbitos laborales y personales. Saber cómo, qué y a quién comunicar no sólo se vuelven una habilidad esencial, sino que son diferenciales en el momento de realizar peticiones, resolver conflictos, lograr el cambio en otros y tener negociaciones más exitosas. En el marco de los proyectos, las comunicaciones son una competencia clave para todos los participantes y en especial para quienes los coordinan y/o dirigen. Y lo mismo sucede en las áreas operativas de las organizaciones.